Pinturas

Es a través de mi trabajo que intento descifrar las misteriosas razones de nuestro estar vivo. Entiendo el arte como un medio para revelar aquellas razones que siento que en general están ocultas a nuestra percepción ordinaria. Para mí, entonces, la pintura se convierte en algo parecido a la meditación. Cuando pinto, puedo percibir destellos de otro plano más sutil que desafían la comprensión, pero que para mí son señales claras de que existe otra realidad insondable.

El paisaje y su inmensidad se extienden ante mis ojos y son parte de él; se convierte en la experiencia humana más real de todas. Lo que todo mi ser experimenta en tal comunión se transmuta luego en el lienzo junto con los recuerdos de experiencias pasadas y, por tanto, del tiempo mismo como una ilusión. Contemplar la naturaleza se convierte entonces en un viaje interior hacia lo más profundo de mi ser, donde todas las preguntas y respuestas están reservadas para ser descubiertas en la vasta extensión de mi corazón. Encuentro en el arte y en la pintura en particular una oportunidad increíble para embarcarme en ese viaje. De eso se trata todo esto.